Salimos con el Bubu... fue genial, como siempre.
En el TIN están presentando una serie de obras en un programa llamado "El mejor teatro del mundo en el T.I.N.".
Lo que hubo hoy fue Teatro de la República Dominicana, representado por la obra "Las Viajeras" de Maria I. Bosch. Excelente obra.
Cuatro dominicanas en la Argentina... El pago de un viaje, el frío,
el tráfico de mujeres, las palabras, el cuerpo, las sábanas, el mismo sueño...
Estas viajeras llegan para hablarnos de la dignidad, el racismo, la
discriminación, la voracidad de la gran ciudad, la marginación, la negación
familiar, la inocencia pueblerina, el desarraigo. Esta pieza, cuya temática es
la situación desventurada de las mujeres dominicanas que viajan a la Argentina
en busca de un futuro promisorio y, engañadas, caen en las redes de la
explotación sexual, fue presentada en República Dominicana y Puerto Rico con
extraordinario éxito de público y excelente acogida de la crítica.
Es un espectáculo de una hora de duración donde una actriz viaja a
través del tiempo y de la historia de cuatro mujeres: Yuberkis (una campesina
cibaeña), Reytania (una prostituta de San Cristóbal), Inés (una chica de clase
media) y Elsa (una lavandera sureña). Ellas tienen sueños. Creen que viajando a
la Argentina tendrán derecho a lo que su país les niega.
"Las Viajeras" es un unipersonal, fruto de la
investigación que María Isabel Bosch hiciera en Argentina cuando se deseempeñaba
como Agregada Cultural de la Embajada Dominicana en Buenos Aires. Participó en
el II Festival Iberoamericano de Teatro Mar del Plata Cumbre de las Américas
2006, obteniendo la premiación de Actriz Revelación, y en el I
Festival Iberoamericano de Teatro de La Plata en octubre de 2006, convirtiéndose
en cierre oficial del Festival.
Ese es el texto impreso en lo que era el programa.
Un espectáculo digno de elogiar: están excelentemente representadas las historias de esas cuatro mujeres, que pasan frio y hambre, de las cuales una se termina ahorcando (Yuberkis), otra (Inés), que no conseguía trabajo por ser vieja, termina tirándose debajo del tren y solo las dos mujeres restantes "aceptan" el hecho de prostituirse y viven de ello.
Algo fabuloso lo deMaria Bosch, que con nada más que cuatro sábanas realiza una actuación brillante, logrando remover el interior del espectador, hacerle "vivir" el personaje, gracias su inmensa capacidad de expresión tanto lingüística como, más que nada, corporal.
Sin más que decir, porque no puedo traducir en palabras todo lo que ví y sentí en una hora, vuelvo a aplaudir de pie a esta extraordinaria creación.